El proyecto se inició en 1990 y se ha ido enriqueciendo con la participación de profesores y alumnos que, gracias a esta propuesta, han descubierto la magia de las palabras.
Para poder profundizar en las claves de esta propuesta hemos hablado con Carmen Ramos.
Pregunta. ¿Cómo nace el proyecto La caja de las palabras mágicas?
Respuesta. Nace de la necesidad, de las carencias, en el campo lingüístico, que encontraba en mis alumnos. Obviamente detecté, también, un cuadriculado programa educativo, encorsetado, serio, inmovilista.
¿Cómo esperamos que los chicos se acerquen a los libros, amen sus historias si no se los acercamos?
Así que decido ponerme en movimiento, generar una dinámica activa y participativa en el estudio, enseñanza de la lecto-escritura. Comienzo a narrar, a contar cuentos, a descubrir con ellos y para ellos. ¡Así de sencillo!! ¡Jugar con las palabras!! Porque éstas tienen que fluir libremente.
Manejar tantas como queramos, para ser millonarios en palabras, para construir nuestro propio diccionario o vocabulario fantástico, para sorprendernos con cuentos clásicos o actuales, para desterrar antiguos temores didácticos, gramaticales, ortográficos… Escribir palabras, relatos, leerlos, escucharlos, eso sí, pacientemente.
Los niños fueron el leitmotiv de un juego sin fin, de un lenguaje vivo, pleno de destrezas imaginativas y creativas.
Las palabras se vuelven traviesas se dan la vuelta y ¡ya tenemos una palabra traviesa!, ¡o enmascarada! Claro, que ya puestos, ¿porqué no atrevernos a ser detectives jefes y descubrimos las frases fantasmas? ¿Y la descripción de un personaje? ¿Cómo creamos nuestra propia selva? Así aparecen las consignas, las tramas descriptivas y organizativas de la información que obtenemos. Personajes, sentimientos, colores, sabores, amigos, imaginación.
Evidentemente todo juego tiene unos objetivos, una fundamentación y una experimentación. Todos están probados en el aula. No me sirve la teoría a secas y bien estructurada, lo que me vale es la práctica y sus resultados.
En realidad el territorio mágico de la estrategia de la Caja Mágica, arranca desde la niñez. Los cuentos, las palabras, han estado presentes en las vidas de los chicos, desde pequeños. Lenguaje oral, pictórico, gestual,…
Yo creé la metodología de La caja de las palabras mágicas, para disfrutar del lenguaje. Sus estrategias metodológicas, revisten de luz todo lo que toca. Las vivencias de su fuerza creativa, la espontaneidad, el disfrute, el misterio que encierra cada sílaba, cada rincón del lenguaje, nos induce a disfrutar de su plenitud.
La literatura es siempre un misterio difícil de descifrar, lo que no nos impide acercarnos a ella, es un reto más y no debemos eludirlo.
P. ¿Cuáles son las claves de esta propuesta pedagógica?
R. Disfrutar con el lenguaje, ésta es la clave. Ella nos llevará hasta el interior de los secretos de las palabras.
Siempre se parte desde una línea de salida, tras la que vamos a encontrar metas alcanzables. Pensamos que si ahora lo hacemos bien, mucho mejor en un futuro cercano. Las etapas superables nos hacen sentir mejor y nuestra seguridad y autoestima crecen.
Descubrimos, sorpresivamente, que ni leemos ni escribimos tan mal como nos habían dicho.
Ser sujetos de su propio aprendizaje es lo primordial para ellos. Por eso, con sagacidad, desarrollamos estrategias participativas y activas.
Los chicos descubren que las palabras de las historias, los llevan hasta el juego creativo. Por lo que aprender resulta divertido, gratificante, alegre, dinámico, asequible. Y esto abarca cualquier ámbito de su desarrollo como ser humano.
P. ¿Cómo responden las niñas y los niños?
R. Su respuesta pasa por momentos de asombro, sorpresa, sonrisas y llegan… a la realidad que es igual de divertida, porque este contexto les permite ser traviesos con el lenguaje y disfrutar de ello. Me atrevería a comentar, que cuando llevo la estrategia a jornadas o talleres para adultos, éstos se lo pasan igual o mejor que los chicos. Muy gratificante la experiencia. Y es que entrar en El misterio de los cristales o descifrar mensajes secretos que habitan en El país de la Cra, es una empresa que nadie quiere perderse.
Los juegos son muy ágiles, duran poco tiempo y siempre se quedan con ganas de más. ¡Esto es estupendo!! Es el estímulo perfecto. Siempre estarán preparados para la creatividad, para generar nuevos lenguajes, para responder con soluciones diferentes, para preguntar o generar debates atractivos. Una palabra absurda lanzada al azar, provoca en la mente ondas superficiales o profundas. Se genera una reacción en cadena que produce imágenes, analogías, recuerdos, fantasías, sueños. Todo esto es el inicio de una situación de comunicación.
P. Han pasado once años desde que el proyecto se pone en marcha, desde entonces han sido muchos los premios que ha recibido y también las colaboraciones y estudios que se han hecho sobre su propuesta. ¿Qué destacaría entre tantas experiencias?
R. Respuesta difícil. Todo ha sido y es fantástico. Evidentemente no se consigue nada sin constancia o empatía. Los premios, especialmente el primero lo recibí como en un estado de irrealidad aventurera, ¿cómo iba yo a pensar que el jurado, al que conocí en Madrid cuando fui a recoger el premio, personas que yo consideraba serias, iban a disfrutar con las travesuras de mi Caja Mágica? Fue un sueño que nunca había soñado, por eso significó tanto para mí. Ese premio me demostraba que estaba en el camino adecuado, que era posible el lenguaje lúdico en las escuelas.
Y aquí sigo, demostrándoles a los chicos y a los mayores, que los libros no son nuestros enemigos, sino todo lo contrario. Ellos, los libros, siempre tienen una paciencia infinita, nos esperan hasta que queramos encontrarlos.
El que realicen estudios sobre mis propuestas lo considero un honor, un premio extra. Que sirva mi trabajo para quitar las telarañas del leguaje es tan fantástico, que aún teniendo muchas palabras, pues, como “palabrista” que soy, así me llamó un profesor amigo, me quedo sin ellas cuando quiero expresar lo que siento.
P. ¿Qué estrategias de apoyo pueden utilizar las madres y los padres para animar a la lectura a sus hijos?
R. Siempre les digo a los padres y madres que compartan los libros con sus hijos. Ya lo hicieron cuando eran casi bebés, ¡hay que continuar! Sólo que ahora, las edades cambian, sus intereses también, lo haremos con otro enfoque.
¿Por qué no compartimos una tarde de biblioteca con nuestros hijos? ¿O una visita a una librería? ¿A una gran superficie con libros?
Recordad, que, lo que nos gustó a nosotros como lectores, tal vez no les interese a ellos, por eso “el boca a boca” de compañeros y amigos, es muy importante.
Comentemos lo que leemos y preguntemos qué es lo que ellos leen, dentro y fuera del colegio. Aquí hay que buscar un equilibrio nada fácil, pues a veces un interés superlativo puede producir el efecto contrario al que buscamos, que es compartir y disfrutar los libros.¿Qué libro comprarles? Seguro que su amigo o amiga tienen mucho que ver en este tema. Si no lo saben para eso están los libreros, los bibliotecarios.
Unos padres que no leen no pueden pretender que sus hijos vayan adosados a un libro. Sí, ya sé, hay familias en las que se lee mucho y el niño o niña no muestra interés lector, ahí estará el guiño que lanzaremos, sin forzar. Algún día recogeremos la recompensa. De ahí que antes haya mencionado la paciencia, activa, eso sí, con sentido del humor. Tengo sobre esto último, anécdotas muy divertidas y especialmente agradables. Luego… ¡Disfrutemos!!!!
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Queremos agradecer a Carmen Ramos su colaboración en boolino. Ha sido un placer poder conversar con ella en torno a un proyecto tan hermoso.
A continuación, podéis encontrar la bibliografía del proyecto La caja de las palabras mágicas.
Bibliografía:
RAMOS, Carmen y SANTANA, Antonio. La Caja de las Palabras Mágicas. Fundamentos y Desarrollo. Málaga: Centro de profesores de Málaga. Junta de Andalucía, 1997.
RAMOS, Carmen. La Caja de las Palabras Mágicas. Cuentos. Málaga: Editorial Arguval, 1997.
Premios:
XII Concurso de Experiencias Escolares. Editorial Santillana, 1995.
XIII Concurso de Investigación Educativa "Joaquín Guichot y Antonio Domínguez". Junta de Andalucía, 1999.
Carmen Ramos, obra completa:
La Caja de las Palabras Mágicas. Cuentos. Málaga: Editorial Arguval, 1997.
El armario de Camila. Málaga: Editorial Arguval, 1999.
El disfraz secreto. Málaga: Editorial Arguval, 2001.
Damasco, la leyenda del torreón. Málaga: Editorial Arguval, 2002.
Cervantes: un hombre en busca de aventuras y palabras. Málaga: Ayuntamiento de Málaga, 2005.
Picasso, el hombre de todos los mundos. Málaga: Editorial Arguval, 2005.
Los chismes de mi cuarto. Málaga: CEDMA, 2006.
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